Salta, en Argentina, no por nada es denominada como “La Linda”. Entre las ciudades y pueblos que la conforman, podremos disfrutar de los paisajes más bonitos de todo el Norte argentino, mientras conocemos las costumbres típicas del lugar, con sus creencias, leyendas, unas buenas empanadas y los tamales más deliciosos. Entre los destinos que nos ofrece Salta, la linda, uno de los más bonitos y con mayores actividades es Cafayate, ubicada al sur de la provincia, límite con Catamarca y Tucumán.
Aquí, la naturaleza ha demostrado que se siente a gusto, porque nos ofrece formaciones únicas e imponentes, las cuales son producto de circunstancias que han tenido lugar hace millones de años atrás. La Quebrada de las Conchas es el lugar indicado para empezar a conocer Cafayate. Esta gran formación, antiguamente estaba tapada por el agua, por lo que, gracias a la erosión por el contacto con el agua, se han formado montañas con diseños muy diversos. Allí podremos encontrar guías turísticos, que por solo 10 euros nos llevarán a conocer esta sucesión mágica de montañas, pasando por El Sapo, El Fraile, El Obelisco, Los castillos y el Titanic, todos representados en las rocas, de una manera increíble, por obra de la propia naturaleza.
En este recorrido podremos conocer la yesera, una formación única, que presenta los colores más variados, gracias a los minerales que han estado en contacto con la montaña: el verde, el azul, el naranja, todos los colores, que representa a minerales que antaño se encontraban en las aguas que recorrían estas tierras.
Por último, a 50 kilómetros de La Quebrada nos encontraremos con dos formaciones únicas: La garganta del Diablo y El Anfiteatro. Este último, presenta una gran acústica, la cual fue obra netamente de la naturaleza. Allí, artistas autóctonos muestran su música con una calidad de sonido mejor a la de cualquier teatro lujoso.
