Ávila – Santo Tomé El Viejo

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Si decidimos dar un paseo por la zona de extramuros de Ávila, podemos hacer una visita a la Iglesia de Santo Tomé El Viejo. Templo de mediados del siglo XII y de estilo románico, que se sitúa frente a la puerta de la muralla conocida como “Peso de la Harina”, que se abrió en el siglo XVI cuando se decidió cegar la Puerta del Obispo.

Realizada de granito caleño se conservan, aún hoy, las portadas meridional y oriental en arco de medio punto y arquivoltas que apoyan en columnas. Destacan, sobretodo por su rica decoración figurativa vegetal y geométrica.

En 1520 se deciden eliminar los ábsides de la cabecera y los arcos de separación de las naves (que fueron sustituidos por grandes columnas formando arcos a cada lado), quedando así reducida la planta a una nave rectangular.

Es curioso destacar también la funcionalidad del edificio a través de la historia: Muchos usos: tras la desamortización de Mendizábal, el templo pasa a manos privadas, haciendo las veces de garaje y surtidor de gasolina. Hasta que, finalmente, en el año 1960 pasará al Estado.
Hoy por hoy, es un anexo del Museo Provincial al que se puede acceder por un módico precio y que funciona como almacén de objetos arqueológicos en piedra como verracos vettones (muy típicos de la zona), estatuas lapidarias o sarcófagos.

Antes de marcharnos de Santo Tomé el Viejo, una leyenda: se cuenta que fue aquí donde Santa Teresa de Jesús fue confesada varias veces por San Pedro de Alcántara.

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