En la Provincia de Buenos Aires, República Argentina, encontramos la Ciudad de Luján. Es un lugar de interés turístico religioso católico, ya que allí se encuentra la Basílica de la Virgen de Luján, maravilla de la arquitectura en su estilo neogótico.
También posee un significativo museo histórico, museo de Bellas Artes, museo devocional de la Virgen de Lujan, sectores para la recreación turística y muchas industrias alimenticias y manufactureras. En la ribera del Río Luján, hay recreos con mesas y fogones, rodeados de una magnífica vegetación, parque de diversiones, alquiler de botes, anchas, kartings y bicicletas, restaurantes, confiterías, una típica feria artesanal y si el viajero lo desea, puede cruzar el río en una aerosilla a 17 metros de altura.
En el Kilómetro 58 del Acceso Oeste (Avenida Gaona) entre General Rodríguez y Luján, se encuentra el Zoológico de Luján. El predio que ocupa, es el casco de una vieja estancia, circunscripta por una vegetación arbórea muy particular. Allí la mayoría de los animales están en un estado de semi libertad. Hay leones, ciervos, pumas, elefantes, monos, lobos marinos, etc. En sus 15 hectáreas, incluye un parque para acampar, un sector de parrillas, canchas de fútbol, pileta de natación, restaurante con platos típicos y una panadería donde los chicos aprenden a amasar el pan.
Historia de la Virgen de Luján:
La virgen de Luján venía desde San Pablo, Brasil, en el mes de mayo de 1630, en una caravana. Cuando llegaron al Río Luján, la caravana se detuvo a descansar. Al día siguiente, los carreteros iban a seguir su viaje, pero la carreta en donde estaba la imagen, no se movía. Hicieron mil intentos, pero todo resultaba inútil. En el fondo de la carreta, había dos cajoncitos con dos imágenes. Retiraron un cajón y la carreta no se movió. La subieron y bajaron el otro cajón, y ante el asombro de todos, la carreta se movió y siguió su itinerario. Los hombres percibieron que allí estaba sucediendo algo milagroso. La Virgen parecía que qería quedarse en ese lugar. La devoción por la Virgen fue creciendo. Pronto la noticia se propagó y llegaron numerosos peregrinos convirtiéndose, más tarde, en la Patrona de Argentina. La Morenita como vulgarmente se la conoce.
